Cuando buscamos respuestas a preguntas emocionales o espirituales, nuestro entorno físico inmediato no es necesariamente tan útil. Centrarnos en nuestras condiciones presentes nos ayuda a navegar nuestro día a día, pero para ponernos en contacto con lo oculto y mirar hacia el futuro, tenemos que profundizar un poco más.
Las practicas esotéricas como los lanzamientos de hechizos y amarres amorosos se basan en la creencia de que el reino físico es simplemente un subproducto de fuerzas energéticas invisibles, incluida nuestra conciencia, pensamientos, voluntad y emociones. Es más, mientras que la mayoría de los pensamientos son absorbidos por nuestra conciencia, otros pueden convertirse en vibraciones autosuficientes.
Cuando elevamos un pensamiento infundiéndolo con nuestra intención mágica, se transforma en energía. Lanzar hechizos es el arte de identificar, elevar y dirigir la energía para actualizar nuestras intenciones, y cuando se trata de asuntos del corazón, los hechizos de amor son la herramienta perfecta para invitar a la positividad y la conexión a nuestras vidas.
Si bien algunos amarres y hechizos de amor son extremadamente complicados, requieren ingredientes oscuros y su implementación en momentos específicos, otros son extremadamente sencillos. Por ejemplo, puedes lanzar un hechizo de amor cargando una vela con intención mágica: Solo debes comunicarle tus deseos a través de palabras, danza, canciones o incluso telepáticamente, luego debes encender la vela y cuando se haya consumido por completo, se habrá lanzado tu hechizo.
Antes de comenzar, es importante recordar que hay algunas reglas a seguir. A continuación encontrarás útiles consejos para un buen amarre.
- Confía en que tu hechizo funcionará: Tu intención es la base de cualquier hechizo. E pocas palabras, si no crees que el hechizo funcionará, no lo hará. Para hacer algún cambio, no solo en el lanzamiento de hechizos, sino en la vida en general, es crucial tener voluntad. Todos los días, las personas cambian el mundo con sus ideas. Tus pensamientos son formas poderosas de energía. Los pensamientos positivos amplifican la abundancia, mientras que los pensamientos negativos atraen la escasez. Si haces un amarre o lanzas un hechizo y no crees que pueda funcionar, estás perdiendo el tiempo.
- No crees expectativas poco realistas: Puedes creer que tu hechizo se encargará de mejorar todas las cosas pero desafortunadamente, los hechizos de amor no transformarán a una rana en príncipe ni harán que tu artista favorito se enamore de ti. Si estás enfocando el hechizo en una persona en específico, debes tener una conexión fuerte con esa persona y no debes intentar transformar quienes son o cómo se sienten. En cambio, debes concentrarte en hacer que su relación crezca.
- Sé claro: A diferencia de las personas, el universo va directo al grano. Por lo que cuando estás lanzando un hechizo de amor, tus intenciones deben ser extremadamente específicas. Recuerda, los hechizos son simplemente conductos de energía, y si tu hechizo se basa en generalizaciones, tus resultados serán imprecisos. Si estás involucrando a tu pareja en el hechizo, puedes enfocarte en esa persona creando un encantamiento que tenga su nombre, por ejemplo. Alternativamente, puedes crear hechizos de atracción para dar la bienvenida a un nuevo amor o liberar bloqueos románticos, y aunque estos conceptos son más amplios, aun puedes especificar intenciones dentro de ellos. Asegúrate de saber exactamente lo que quieres lograr antes de comenzar tu hechizo.
- Mantente alerta: Cuando lances un hechizo o hagas un amarre, estarás canalizando una gran cantidad de energía, así que no te sorprendas si sientes físicamente las vibraciones que estás proyectando. Tus sentidos también se intensificarán y serás más receptivo a los cambios sutiles dentro de tu entorno, incluidos los movimientos, las temperaturas y los sonidos. Ten en cuenta que no es posible ni deseable permanecer en ese estado energético elevado en todo momento, así que no te preocupes cuando se disipe después de que hayas lanzado el hechizo.
- No te obsesiones con los resultados: Hay una línea fina entre la conciencia y la compulsión. Una vez que sueltes tu hechizo de amor, este tomará la mejor ruta para llegar a su destino, pero esta ruta no será necesariamente la más rápida. Tu energía tiene el poder de sortear obstáculos, pero para que el universo haga lo suyo, debes darle tiempo, espacio y confianza. Cuando te obsesionas con el resultado de tu hechizo, infundes esta corriente energética con desesperación, miedo y duda. Esta energía confunde la efectividad de las manifestaciones, así que tómatelo con calma y deja que todo fluya.
- Recuerda que todo se devuelve: Siempre que estés absorbiendo y dirigiendo energía, considera la ley del triple retorno: Todo lo que liberes al mundo, positivo o negativo, te será devuelto tres veces. Dependiendo del hechizo, esta triplicidad puede referirse a secuencia o potencia, pero independientemente, lanzar hechizos éticamente conducirá a los mejores resultados para los demás y para ti.